¿Puedo tener parto natural si mi bebé tiene el cordón enredado en el cuello?
- Claudia Rodriguez
- 27 nov
- 3 Min. de lectura
Durante el embarazo, uno de los hallazgos que puede generar más preocupación en las futuras mamás es cuando, en una ecografía prenatal, se detecta que el bebé tiene el cordón umbilical enredado en el cuello. Esta situación, conocida médicamente como circular de cordón a cuello, es mucho más común de lo que parece; sin embargo, no siempre representa un riesgo ni significa que el parto natural sea imposible.
En este artículo te explicaré qué significa realmente tener el cordón alrededor del cuello, cuándo puede representar un problema y qué medidas se toman para cuidar la seguridad del bebé durante el parto.

¿Qué es el circular de cordón?
El circular de cordón ocurre cuando el cordón umbilical —la estructura que conecta al bebé con la placenta y le provee oxígeno y nutrientes— se enrolla alrededor de una parte del cuerpo del feto, con mayor frecuencia alrededor del cuello.
Este fenómeno es muy frecuente: se estima que entre un 20% y 30% de los embarazos presentan una circular de cordón en algún momento, y la mayoría de las veces no causa ningún problema.
El cordón umbilical es una estructura flexible, protegida por una sustancia gelatinosa llamada gelatina de Wharton, que evita que los vasos sanguíneos se compriman con facilidad. Esto significa que, incluso si el cordón rodea el cuello, normalmente no interfiere con el flujo de oxígeno ni con el bienestar del bebé.
¿Por qué ocurre el circular de cordón?
La causa más habitual es simplemente el movimiento del bebé dentro del útero, especialmente en el segundo y tercer trimestre, cuando aún tiene espacio suficiente para girar o cambiar de posición.
Otros factores que pueden favorecer el circular de cordón incluyen:
Cordones umbilicales más largos de lo habitual.
Aumento de líquido amniótico (polihidramnios), que permite mayor movilidad.
Embarazos múltiples, donde los movimientos fetales son más activos.
En la mayoría de los casos, se trata de una condición pasajera que incluso puede desaparecer por sí sola antes del parto.
¿El circular de cordón impide un parto natural?
No necesariamente. La presencia del cordón enredado en el cuello no significa que el parto deba ser cesárea ni que el bebé esté en peligro inmediato.
Durante el trabajo de parto, el equipo médico monitorea cuidadosamente la frecuencia cardíaca fetal mediante un registro electrónico. Si se observa que el bebé tolera bien las contracciones y no hay signos de sufrimiento fetal, el parto puede desarrollarse por vía vaginal con total seguridad.
En cambio, si se detecta alguna alteración en el ritmo cardíaco que sugiera que el cordón está afectando el flujo de oxígeno, entonces se puede valorar una intervención o una cesárea, siempre priorizando la seguridad del bebé y de la madre.
¿Qué pasa si el bebé nace con el cordón enredado?
En muchos partos naturales, los bebés nacen con una o incluso dos vueltas de cordón alrededor del cuello, y el obstetra simplemente lo desenrolla en el momento del nacimiento. En la gran mayoría de los casos, el bebé nace sin complicaciones y en perfecto estado.
Lo importante es que el parto ocurra en un entorno controlado, con un equipo de salud que tenga experiencia en manejo obstétrico y monitoreo fetal continuo.
¿Cómo se detecta el circular de cordón?
Las ecografías Doppler y las ecografías de control en el tercer trimestre pueden detectar la presencia del cordón alrededor del cuello del bebé.
En Vinatal, los especialistas en medicina materno-fetal utilizamos tecnología avanzada de ultrasonido para evaluar:
La presencia y número de vueltas de cordón.
El flujo sanguíneo a través de los vasos umbilicales.
El bienestar fetal mediante estudios como la hemodinamia fetal.
Esta información permite establecer un plan de parto personalizado y seguro, según las condiciones de cada embarazo.
En resumen, lo que debes saber es:
El circular de cordón es un hallazgo frecuente y, en la mayoría de los casos, no representa un riesgo para el bebé.
Tener el cordón enredado no impide un parto natural si el monitoreo fetal es adecuado.
Las ecografías especializadas permiten vigilar su evolución y planear el nacimiento con seguridad.
Lo más importante es mantener la calma y seguir las recomendaciones de tu especialista.
Confía en tu equipo médico. Cada embarazo es único. En Vinatal, nuestro equipo de especialistas en medicina materno-fetal te acompaña con un enfoque profesional, empático y personalizado.


