¿Es normal la hinchazón en el embarazo? ¿Qué puedo hacer para disminuir este síntoma?

Es bastante común que las mujeres embarazadas experimenten hinchazón en los pies, tobillos e incluso en las manos, especialmente durante el segundo y tercer trimestre. Este fenómeno es completamente normal y generalmente no es motivo de preocupación. 

La hinchazón, también conocida como edema, ocurre cuando se acumula líquido en los tejidos, lo cual es más frecuente en el embarazo debido a varios factores, como los cambios hormonales y el aumento del volumen sanguíneo. La retención de líquidos en las piernas y los pies es especialmente común porque el cuerpo retiene más agua durante el embarazo para ayudar en el desarrollo del bebé y en el proceso de parto.

A medida que el útero crece, ejerce presión sobre las venas pélvicas y la vena cava, que transporta sangre desde las extremidades inferiores al corazón. Esta presión ralentiza el flujo sanguíneo de las piernas hacia el corazón, lo que provoca que el líquido se acumule en los pies y tobillos.

La hinchazón es más común en el tercer trimestre y puede ser más intensa en mujeres con embarazo múltiple, exceso de líquido amniótico o en aquellas que tienden a retener líquidos incluso fuera del embarazo; además, suele empeorar al final del día o en climas calurosos.

Después del parto, la hinchazón puede aumentar temporalmente, pero luego disminuye gradualmente a medida que el cuerpo elimina el exceso de líquido. Es probable que orines más y sudes mucho en los primeros días después del nacimiento de tu bebé, lo cual ayuda a eliminar este exceso de líquido.

¿Cuándo deberías preocuparte por la hinchazón?

A lo largo del embarazo, sobre todo al final, es normal tener algo de hinchazón en los pies, tobillos e incluso en las manos, pero si experimentas hinchazón en la cara, alrededor de los ojos, o la hinchazón es excesiva o repentina, debes consultar a tu médico. Estos pueden ser signos de preeclampsia, sobre todo si tu presión arterial se está elevando; también, si notas que una pierna está más hinchada que la otra, está caliente, enrojecida o bien si sientes dolor en la pantorrilla o muslo, podría indicar un coágulo sanguíneo u otra condición seria, por lo que también debes buscar atención médica.

¿Qué puedes hacer para disminuir la hinchazón?

Aquí te comparto algunos consejos para aliviar la hinchazón en el embarazo:

1. Recostarte de lado: Es útil acostarse de lado, especialmente del lado izquierdo, para reducir la presión sobre las venas.

2. Elevar los pies: Intenta poner los pies en alto siempre que puedas. En el trabajo, puedes usar un pequeño banco o una pila de libros para elevarlos.

3. Evitar cruzar las piernas: No cruces las piernas ni los tobillos cuando estés sentada.

4. Estirar las piernas: Estira las piernas y mueve los pies con frecuencia para mejorar la circulación.

5. Tomar descansos: Alterna entre estar sentada y caminando para evitar la acumulación de sangre en las extremidades.

6. Usar calzado cómodo: Usa zapatos que se adapten a la hinchazón y evita medias o calcetines apretados.

7. Medias elásticas de mediana compresión: Considera usar medias elásticas para embarazadas, especialmente si durante el día permaneces mucho tiempo en una misma posición.

8. Mantente hidratada: Aunque parezca contradictorio, beber mucha agua puede ayudar a reducir la retención de líquidos. 

9. Realizar actividad física y ejercicios de estiramiento: Caminar, nadar, practicar yoga o usar una bicicleta estática puede ser beneficioso para mejorar la circulación y reducir la hinchazón.

10. Alimentación saludable: Mantén una dieta equilibrada y evita el exceso de comida chatarra y el exceso de sal.

Aunque la hinchazón durante el embarazo puede ser incómoda, es una condición temporal que desaparecerá después del parto, cuando tu cuerpo elimine el exceso de líquido. Así que ten paciencia y trata de seguir estos consejos para evitar que este síntoma interfiera con el disfrute de tu embarazo.